Mientras Brasil, Argentina y Guyana impulsan un nuevo boom petrolero en Sudamérica con incrementos significativos en su producción, Ecuador enfrenta dificultades. Nuestro país no pudo, durante el 2025, cumplir su meta de 500 mil barriles diarios al cierre de 2025. Todo esto en un contexto regional donde se proyecta un crecimiento del 30 % en la extracción hasta 2030, superando el ritmo de Medio Oriente y Estados Unidos.
El Gobierno ecuatoriano, a través de María Daniela Conde, anunció en septiembre de 2025 que el objetivo era cerrar el año con 500 mil barriles diarios. Datos oficiales de la Agencia de Regulación y Control de Hidrocarburos (ARCH) indican que la producción nacional se mantiene entre 470 y 480 mil barriles diarios. Esto se debe a desafíos como el cierre progresivo del bloque ITT y reducciones en inversiones de Petroecuador.
